Hasta el viejo hospital de los muñecos
llegó el pobre pinocho malherido,
un cruel espantapájaros bandido
lo sorprendió durmiendo y lo atacó.
Llegó con su nariz hecha pedazos,
una pierna en tres partes astillada;
una lesión interna y delicada
que el medico de guardia lo atendió.
A un viejo cirujano llamaron con urgencia
y con su vieja ciencia pronto lo remendó,
pero dijo a los otros muñecos internados:
todo esto sera en vano,le falta el corazón.
El caso es que pinocho estaba grave,
en si de su desmayo no volvía
y el viejo cirujano no sabia
a quién pedir prestado un corazón.
Entonces,llegó el hada protectora
y viendo que pinocho se moría
le puso un corazón de fantasía
y pinocho sonriendo despertó.
Entonces llegó el hada protectora
y viendo que pinocho se moría
le puso un corazón de fantasía
y pinocho sonriendo despertó
y pinocho sonriendo despertó